Cuando se menciona la pizza, normalmente se visualiza una masa esponjosa y crujiente. Sin embargo, para quienes buscan una alternativa rápida y deliciosa, la pita es la opción perfecta. Hoy, les compartimos una receta de pizza pita decorada con champiñones al perejil y calabaza con queso fresco, ideal para una cena amena y reconfortante. Este plato sencillo y veloz de preparar conquistará sus paladares y los de sus invitados.
Ingredientes
Utensilios
Preparación
Paso 1
Precaliente el horno a 200°C (termostato 6-7).
Paso 2
Pele y corte la calabaza butternut en pequeños cubos. Colóquelos en una bandeja para hornear, rocíe con una cucharada de aceite de oliva, sazone con sal y pimienta, y hornee durante 20 minutos.
Paso 3
Mientras tanto, corte finamente los champiñones de París y pique el ajo.
Paso 4
En una sartén, caliente una cucharada de aceite de oliva y añada el ajo y los champiñones, cocinando a fuego medio durante 5 a 7 minutos, hasta que estén dorados.
Paso 5
Agregue el perejil picado a los champiñones, mezcle bien y retire del fuego.
Paso 6
Una vez que la calabaza esté cocida, mézclela con el queso fresco utilizando una batidora de mano hasta obtener un puré suave y cremoso.
Paso 7
Coloque las pitas en una bandeja para hornear. Extienda uniformemente el puré de calabaza sobre cada pita.
Paso 8
Distribuya la mezcla de champiñones al perejil sobre las pitas, y luego hornéelas durante 10 minutos.
Paso 9
Saque las pizzas pita del horno y sírvalas calientes.
Mi consejo de chef
Para un toque crujiente, añada unas nueces o semillas de calabaza en la parte superior antes de hornear.
Maridaje de platos y vinos
Un vino blanco seco, como un chardonnay, complementará perfectamente esta pizza pita, equilibrando los sabores terrosos de los champiñones y la dulzura de la calabaza.
La pizza pita, originaria de Medio Oriente, es una excelente alternativa a la pizza tradicional. Es rápida de preparar y admite numerosas variaciones según los gustos y las estaciones.
