Sin referencias concretas a terminar con el mayor anhelo de la movilización estudiantil, el fin al lucro en la educación, minutos antes de las 21 horas el Presidente Sebastián Piñera entregó al país las propuestas del Ejecutivo bajo la sigla GANE (Gran Acuerdo Nacional por la Educación) solicitando al Ministro de Educación Joaquín Lavín reunir los consensos que permitan su aprobación. Sin duda este anuncio no dejará indiferentes a quienes llevan semanas protestando por un cambio profundo en el sistema educacional.
«Hay algunos que abogan por una total estatización de la educación en Chile. Creemos que ello constituye un grave error y daña profundamente tanto la calidad como la libertad de enseñanza», fue la respuesta del Presidente agregando que el Estado y la sociedad civil deben aportar a la educación; lo cual lleva a dirigir las ideas a que será poco probable por ahora traspasar los recintos educacionales, en manos de los municipios desde 1986, al gobierno central.
«Como Presidente debo abordar los problemas y carencias de nuestro sistema educacional que se arrastra por décadas, con un sentido de urgencia, de realismo y una visión de futuro», explicó.
Acerca de las movilizaciones, Sebastián Piñera expresó que «es tiempo de terminar con las tomas y protestas y recuperar los caminos del diálogo y los acuerdos». El acuerdo GANE propone principalmente:
1.- La creación de un Fondo para la Educación (FE) por un monto de 4 mil millones de dólares constituido por recursos del Tesoro Público, del Fondo de Estabilización Económico y Social, excedentes del cobre, entre otros que se convengan.
2.- Mejorar el acceso y calidad del financiamiento a los estudiantes, más becas y créditos más económicos, aumentando de 70 a 120 mil las becas para la educación técnico profesional, e incrementar en un 20% su monto. También garantizar al 40% de alumnos más vulnerables y con mérito académico una beca para acceder a la institución de educación superior acreditada que ellos mismos elijan. Se reducirá la tasa de interés del Crédito con Aval del Estado a cifras cercanas al 4% en un año normal permitiendo una rebaja significativa en el monto de las cuotas de pago y una suspensión de éstas en caso de desempleo. Adicionalmente se propondrá un nuevo sistema que reemplace al actual Crédito con Aval del Estado, rediseñar el Fondo de Crédito Solidario para potenciar su recuperación y destinar esos recursos a nuevas becas y reprogramar a los 110 mil deudores morosos para permitirles reiniciar sus pagos y salir de Dicom.
3.- Mejorar los sistemas de admisión, acreditación, información y fiscalización del sistema universitario, considerando el ranking y las notas de los estudiantes además de la PSU en los métodos de admisión; fortalecer la rigurosidad de los sistemas de acreditación, establecer un sistema de información de las instituciones de Educación Superior; crear una nueva institucionalidad a través de la Subsecretaría y Superintendencia de la Educación Superior; modernizar el gobierno universitario en las entidades de educación superior estatales, permitiendo el endeudamiento a mayores plazos.
4.- Definir una nueva institucionalidad para el sistema universitario, que diferencie universidades estatales, tradicionales no estatales y privadas no tradicionales, analizando la posibilidad de distinguir entre estas últimas (privadas no tradicionales), las sin y las con fines de lucro. De acordarse la existencia de estas últimas, ellas deberán pagar impuestos por sus utilidades, destinados al financiamiento de becas y préstamos para los alumnos más vulnerables.