Ante una nueva jornada de movilización nacional convocada por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), el presidente del Consorcio de Universidades Estatales y rector de la Universidad de Santiago, Juan Manuel Zolezzi, expresó su adhesión y apoyó las demandas de los estudiantes.
La autoridad académica valoró la apertura al diálogo de la Confech con el Ministerio de Educación, que se concretó en una reunión entre las partes este lunes, no obstante aseguró que no deja de ser atendible la posición de los estudiantes tras este encuentro. “Exigen una señal política del gobierno en temas que consideran claves para el sector, como es aumentar el financiamiento público para las universidades estatales, mayor participación y democratización en las instituciones que conforman el sistema; y acceso con equidad”.
El presidente del Consorcio de Universidades del Estado, insistió a través de una declaración pública, que el creciente aumento de la matrícula en el sistema de Educación Superior del país amerita una reforma general que apunte a mejorar las oportunidades de los jóvenes chilenos con talento académico y cuyas familias no pueden pagar por sus estudios.
“Tener uno o varios hijos estudiantes en la universidad no debería alterar el presupuesto de las familias de menos recursos u obligarlos a privarse de bienes y servicios de primera y segunda necesidad, menos a endeudarse de por vida a tasas de interés poco razonables. El factor dinero no debe inhibir los anhelos de quienes tienen la capacidad y el mérito para ingresar a la educación terciaria. El país no puede darse el lujo de desperdiciar talento por falta de recursos”, aseveró Zolezzi.
El rector de la Usach recalcó que esta nueva movilización no es una mera obsesión estudiantil. “Es el clamor desesperado y solidario de una juventud que ve cómo un sistema injusto y perverso los aleja de las oportunidades que entrega la Educación Superior. Es la interpelación a un sistema que cobra los impuestos más altos del mundo vía aranceles universitarios. Es la interpelación a un Estado que deja a merced del mercado los sueños y aspiraciones de varios miles de estudiantes y de sus familias”.
Finalmente, la autoridad planteó: “Confío en que los estudiantes de Chile estarán a la altura de las circunstancias, expresando su molestia y disconformidad de manera pacífica y ordenada, en un marco de plena tolerancia y respeto”, concluyó.