El brote de Anemia Infecciosa Salmonídea (ISA) en las islas Shetland no fue observado al pie de la letra por la industria salmonera de las islas Shetland., lo que puede haber agravado la aparición de la patología en esas aguas, informó la autoridad sanitaria escocesa.
Charles Allen, jefe de grupo del centro de fiscalización de salud de peces Fish Health Inspectorate en Aberdeen, Escocia, reveló que muchas empresas productoras de salmón experimentaron dificultades para mantener la continuación de sus negocios cuando se impusieron restricciones al movimiento (traslado) de peces para mantener bajo control una grave patología notificable en todo el área de manejo.
“A pesar de que habían vías para la evacuación de desechos orgánicos de producción rutinarios, no había ningún método inmediato para deshacerse de grandes cantidades de desechos orgánicos controlados de los centros de cultivo”, explicó el funcionario.
El 2 de enero de 2009 se confirmó el primer brote de Anemia Infecciosa Salmonídea (ISA) en un centro de cultivo y engorda de las islas Shetland, el primer brote de ISA en Escocia desde un brote anterior en 1998.
El centro de cultivo en cuestión había sido visitado por las autoridades de salud de peces por otro motivo durante diciembre 2008 por funcionarios del Fish Health Inspectorate del entonces Centro de Investigación Pesquera, ahora parte de Marine Scotland. Durante esa visita inspectiva se observaron peces moribundos, por lo que se tomaron muestras diagnósticas de rutina. A esa fecha no se sospechaba de la presencia del ISAV ni se descubrieron señales que sugirieran una infección por ISA tras la autopsia post mortem, sin embargo resultados pruebas de cultivo efectuadas en laboratorio junto con pruebas de reacción en cadena a polimerasa, dieron positivas al virus del ISA, lo que posteriormente confirmaron la presencia de la patología infecciosa en otros dos centros de cultivo que habían recibido salmones para engorda provenientes del primer centro infectado.
Estos otros dos centros de cultivo se encuentran al suroeste de las islas Shetland, una de las áreas de cultivo y de manejo de engorda más intensamente cargados de peces de las operaciones acuícolas escocesas, produciendo aproximadamente el 10% de todo el salmón de cultivo de Escocia.
Hay unos 40 centros de cultivo de salmón en el área y se impusieron restricciones al movimiento de peces – tanto vivos como muertos – a todos ellos. Además, a los centros de cultivo – tanto confirmados infectados como bajo sospecha – se les impusieron aún mayores restricciones, fiscalizándose los botes, equipos y el personal.
Según Allen, inmediatamente se enviaron fiscalizadores pesqueros al área, para asegurar que los requerimientos de bioseguridad estaban siendo aplicados en su totalidad y recopilar información respecto de la biomasa de los peces en las jaulas dentro del área afectada además de fiscalizar esta biomasa para comprobar si es que hubiera alguna evidencia de una propagación del virus.
Como resultado de estas fiscalizaciones y muestras tomadas posteriormente, entre el 30 de enero y 20 de marzo se confirmaron otros dos centros de cultivo de salmón infectados con el virus del ISA.
Todos los peces que se encontraban en jaulas de centros bajo sospecha de padecer la patología han sido retirados de las jaulas de manera biosegura, bajo supervisión de las autoridades, siendo cosechados para consumo humano y siendo procesados en plantas aprobadas para el caso. Muchos salmones habían sido cosechados antes de la confirmación de la infección de los centros, a principios de enero.
“Un completo informe sobre este brote epidemiológico será publicado a su debido tiempo,” informó Charles Allen.
Por: Peter Neilson
Foto archivo: revista Mytilus