Con parches blancos tapando la boca los dirigentes de la industria salmonera y la CUT manifestaron el silencio que desde ahora tendrán con el Gobierno, decisión que refleja la molestia en el gremio por la ralentización y burocracia en la aplicación de las medidas que se han anunciado desde hace meses tendientes a evitar la alarmante cantidad de cesantes que crece cada semana en la zona.
Doris Paredes, Presidenta provincial de la CUT y dirigenta del sector salmonero expresó que: «No hay más diálogo con el Gobierno, nos hemos sentido pasados a llevar y vulnerado nuestro derecho y dignidad. Nos han tramitado desde el año pasado, han tomado medidas cada dos meses y no se han visto reflejadas en la zona».
«Se han ofrecido puestos de trabajo, nadie sabe dónde están, a quién se va a dirigir, es un verdadero desorden. Pedimos un coordinador que no se ha hecho efectivo, ahora es demasiado tarde».
Sobre el número de desempleados, Doris Paredes aseveró que se ha llegado al cálculo de 10 mil cesantes en la región de Los Lagos y Aysén, vaticinando prontamente la suma de 5 mil cesantes más. Paredes agregó que las autoridades han admitido que no han sido lo suficientemente eficientes que no han sido capaces de coordinarse indicando que el presupuesto está pero no han sabido canalizarlo.
El futuro de los trabajadores se decidirá en una reunión, no se descartan movilizaciones más duras incluso que pueden llegar hasta el Palacio de La Moneda.
Jaime Bustamante, dirigente del sindicato de AquaChile enfatizó que retomarán el diálogo cuando existan acciones concretas y contesten las propuestas y que no aceptarán intermediarios con el Gobierno.
Texto y foto: Mauricio Sáez E.