Para consagrar un año espectacular en resultados dentro de la cancha y de alegrías a los hinchas, los vecinos de Puerto Montt podrán ver en vivo el partido que definirá si los Delfines regresan al fútbol de honor ante Everton este domingo, ya que la Municipalidad de Puerto Montt instalará una pantalla gigante en la Plaza de Armas para transmitir en vivo el encuentro, programado entre las 13 y 15 horas.
Aunque la faena es difícil, para los dirigidos por Erwin Durán no es imposible y ya tras el 1 – 3 en Viña del Mar ante el cuadro ruletero se juramentaron dar vuelta el resultado cuya diferencia es completamente abordable, sobre todo por los malos resultados que ha cosechado el cuadro visitante cuando sale de su reducto.
Debido a que las entradas para el estadio Chinquihue están completamente agotadas y ante los repetidos requerimientos de organizaciones y particulares, el municipio decidió transmitir el compromiso, directamente de la señal del canal CDF.
El último torneo que Deportes Puerto Montt disputó en Primera División fue en 2007, siendo la de 2012 una que se recuerda con tristeza por finalizar en el último lugar de la tabla acumulada de la Primera B, bajando a la Segunda División Profesional.
La temporada 2013-14 fue una de las mejores campañas del club en la historia. Peleó palmo a palmo el campeonato con Iberia, que lo venció en la penúltima fecha en Puerto Montt quitándole la opción de ascenso directo a una fecha del término. Finalmente, cayó ante San Antonio Unido en San Antonio, finalizando tercero en la tabla con 46 puntos, a sólo dos del campeón, Iberia.
En la temporada 2014-15, logra salir campeón de la Segunda División Profesional, tras golear a San Antonio Unido por 4-0 en el Chinquihue, quitándole el primer lugar a los del puerto central, logrando así su ascenso a la Primera B, tras su descenso en el año 2012. Los goles fueron por dobletes por parte de Pablo Corral (ambos de penal) y Javier Parraguez.
Aunque siempre ha enfrentado tareas difíciles, el equipo ha sabido sortear los obstáculos y superar los goles en contra, como justamente ocurrió con Iberia (4-0).